El viernes, día 7 de febrero hacía ya 10 días que el Director del instituto había pedido una reunión al Director del Área y, al no recibir respuesta, aprovechó aquél una visita a la DAT para abordar a éste, y le habló de los graves problemas que crearía la supresión de tres rutas.
De pie, en el pasillo, el Director del Área le dijo dos cosas importantes: “no voy a cambiar de opinión” (de suprimir tres rutas). Ante la preocupación de nuestro Director por las consecuencias de esa decisión, le dijo también: “aquí el problema que hay es que tres profesores están en contra del Alcalde”.
Tienen su importancia las dos y vamos a pensarlas.
Que dijera “no voy a cambiar de opinión” es muy llamativo porque parecía que sí había cambiado de opinión. En la reunión que tuvo el día 29 de enero con el Alcalde (acompañado de la Concejala de Educación) le había dicho que tendría una reunión con el Director de Infraestructuras para ver “qué se podía hacer”. Sin embargo, esa reunión no ha tenido ni tendrá lugar. El Director del Área no irá “a ver qué se puede hacer” porque él no ha cambiado de opinión (a pesar de su reunión con el Alcalde). Si cambia de opinión será porque alguien o algo le ayude un poco más.
Que dijera “el problema que hay es que tres profesores están en contra del Alcalde” es propio de la escasa sensibilidad mostrada todo el tiempo hacia los alumnos y los padres y madres del instituto que sufrirán las graves consecuencias de su decisión. El Director del Área no ve que crea un problema, y tal vez un conflicto. La insensibilidad, grosera, hacia nuestro Director, a quien no recibe, con quien conversa en el pasillo de pie y a quien deja de pie en el pasillo sin despedirse, nos duele y se lo diremos en cuanto podamos.
Porque aquí, el problema que había y que sigue habiendo es que doscientos alumnos se quedarán sin transporte escolar por su decisión. A menos que lo impidamos.
Puesto que el señor Macías no se refiere al AMPTA sino a una parte de ella y no los considera representantes de padres (Presidente, Vicepresidente, Secretario, Tesorera, etc.) sino que nombra a algunos y por sus profesiones, nos vemos en la libertad de hacer nosotros también distinciones dentro de las instituciones, por ejemplo no referirnos a la DAT, sino al señor Macías, etc.
Pero ¿de dónde saca el Sr. Macías la información de que hay tres profesores y la idea de que están en contra del Alcalde? El señor Macías no se ha comunicado con el AMPTA del instituto nunca. Así que se lo han dicho. Alguien le ha debido dar esa información y sugerir esa idea. Alguien que sí conoce al AMPTA y que vive en Villanueva del Pardillo. También ésta es una interesante distinción.
Ahora, hay madres y padres que comentan que “esto está politizado” y, a pesar de que se duelen de que sus hijos vayan a perder el transporte escolar, y de que interiormente están de acuerdo con que sus representantes intenten impedirlo, tienen ya dudas sobre si apoyar o no las iniciativas de las APAs. Esas dudas sólo las pueden resolver ellos mismos.
Es la misma la idea del señor Macías, y tiene el mismo origen. Una persona que no está ayudando a las APAs a resolver el problema, que está dificultando la solución del problema, y que ha estado con el señor Macías.
Sería penoso que alguien, incluso alguien que tal vez tenga mezclados los intereses políticos con los económicos, esté intentando dificultar la participación y la organización de los padres y las madres que quieren proteger a sus hijos.
En el AMPTA del instituto hay padres o madres de alumnos o de alumnas, que tienen sus profesiones y sus trabajos, que están intentando parar este atropello que el señor Macías quiere hacer con alguna ayuda en Villanueva, que están informando a los padres y las madres lo mejor que saben porque creen que los padres y las madres tienen derecho a tener esa información que les afecta y a tener la oportunidad de defender a sus hijos e hijas. Si los padres y las madres quieren o no defender a sus hijos, una vez informados, es ya asunto de ellos.
Nadie del AMPTA dice sus pensamientos políticos ni se le preguntan. Si tienen preferencias, conocidas o no, es asunto interesante pero asunto de cada uno de ellos.
El AMPTA no se va a callar, va a seguir dedicando su tiempo a defender a sus propios hijos y a los hijos de los demás, incluidos los de aquellos padres o madres que tengan dudas sobre lo que hace el AMPTA. Lo va a hacer como se hace en toda institución participativa y representativa: reuniéndose, debatiendo, comunicándose con los padres y madres, dialogando con otras instituciones, etc. A sus reuniones, que son abiertas siempre, pueden acudir los padres o madres que lo deseen y puedan, claro está que sólo aquéllos que tengan a sus hijos en el instituto (condición única).
Nadie en el AMPTA vive de la política sino de su trabajo. Por eso pensamos que quienes tienen que resolver este problema son los políticos que sí viven de la política. Y éste es un problema político (no es un fenómeno de la Naturaleza): urbanístico, normativo, presupuestario y administrativo. Varias instituciones políticas han creado el problema, no el AMPTA. Y es lo bueno que ellos lo resuelvan. Porque nuestros hijos tienen que ir al instituto en transporte escolar, con la misma consideración que han tenido hasta ahora.
El Alcalde es la institución más representativa y es la que más fuerza institucional tiene en el municipio ante otras instituciones. Ha sido elegido por los ciudadanos, y por cuatro años, al término de los cuales sólo puede ser removido por quienes le han elegido y por el mismo procedimiento. En cambio, por ejemplo un Director de Área lo es por libre designación de una autoridad superior, no tiene cimientos en nadie porque no representa directamente a nadie, su ejercicio no tiene plazo, está disponible y puede ser cesado en cualquier momento por quien le designó, por ejemplo si comete errores o si crea problemas.
Por eso el AMPTA considera al Alcalde como el mejor negociador, cuyos primeros pasos ya ha dado y que el AMPTA apoya. El AMPTA está a favor del Alcalde en sus negociaciones ante la DAT, o ante la Consejería de Educación, a donde ya ha dirigido un primer contacto.
El AMPTA confía en que el Alcalde, que ya ha mostrado y manifestado su preocupación por el problema, sabrá resolverlo. Ya lo hizo, cumpliendo su promesa, desde el principio del instituto, pues durante dos años hizo que el ayuntamiento pagara el transporte y luego logró que lo pagara la DAT.
Estamos convencidos de que el transporte era necesario, el Alcalde lo dijo y prometió, ordenó su pagó y luego lo negoció en la DAT. Nada ha cambiado y por tanto sigue siendo necesario hoy y en el futuro. Confiamos por segunda vez en que, como la primera, sabrá encontrar la solución.
Esperamos que la corporación municipal, toda, estará detrás de él y a lo que diga él, que no es otra cosa que lo que decimos las APAs y los Consejos escolares y los Equipos directivos y los Claustros y los alumnos del instituto: que necesitamos las seis rutas de siempre con los seis autobuses de siempre y que los alumnos de bachillerato vayan dignamente a estudiar al instituto.
Después de todo, la situación sigue siendo la misma: han decidido que nuestros hijos vayan andando y nosotros vamos a defender a nuestros hijos para que vayan dignamente, como merecen, en autobús, como siempre.
AMPTA Ies Sapere Aude
De pie, en el pasillo, el Director del Área le dijo dos cosas importantes: “no voy a cambiar de opinión” (de suprimir tres rutas). Ante la preocupación de nuestro Director por las consecuencias de esa decisión, le dijo también: “aquí el problema que hay es que tres profesores están en contra del Alcalde”.
Tienen su importancia las dos y vamos a pensarlas.
Que dijera “no voy a cambiar de opinión” es muy llamativo porque parecía que sí había cambiado de opinión. En la reunión que tuvo el día 29 de enero con el Alcalde (acompañado de la Concejala de Educación) le había dicho que tendría una reunión con el Director de Infraestructuras para ver “qué se podía hacer”. Sin embargo, esa reunión no ha tenido ni tendrá lugar. El Director del Área no irá “a ver qué se puede hacer” porque él no ha cambiado de opinión (a pesar de su reunión con el Alcalde). Si cambia de opinión será porque alguien o algo le ayude un poco más.
Que dijera “el problema que hay es que tres profesores están en contra del Alcalde” es propio de la escasa sensibilidad mostrada todo el tiempo hacia los alumnos y los padres y madres del instituto que sufrirán las graves consecuencias de su decisión. El Director del Área no ve que crea un problema, y tal vez un conflicto. La insensibilidad, grosera, hacia nuestro Director, a quien no recibe, con quien conversa en el pasillo de pie y a quien deja de pie en el pasillo sin despedirse, nos duele y se lo diremos en cuanto podamos.
Porque aquí, el problema que había y que sigue habiendo es que doscientos alumnos se quedarán sin transporte escolar por su decisión. A menos que lo impidamos.
Puesto que el señor Macías no se refiere al AMPTA sino a una parte de ella y no los considera representantes de padres (Presidente, Vicepresidente, Secretario, Tesorera, etc.) sino que nombra a algunos y por sus profesiones, nos vemos en la libertad de hacer nosotros también distinciones dentro de las instituciones, por ejemplo no referirnos a la DAT, sino al señor Macías, etc.
Pero ¿de dónde saca el Sr. Macías la información de que hay tres profesores y la idea de que están en contra del Alcalde? El señor Macías no se ha comunicado con el AMPTA del instituto nunca. Así que se lo han dicho. Alguien le ha debido dar esa información y sugerir esa idea. Alguien que sí conoce al AMPTA y que vive en Villanueva del Pardillo. También ésta es una interesante distinción.
Ahora, hay madres y padres que comentan que “esto está politizado” y, a pesar de que se duelen de que sus hijos vayan a perder el transporte escolar, y de que interiormente están de acuerdo con que sus representantes intenten impedirlo, tienen ya dudas sobre si apoyar o no las iniciativas de las APAs. Esas dudas sólo las pueden resolver ellos mismos.
Es la misma la idea del señor Macías, y tiene el mismo origen. Una persona que no está ayudando a las APAs a resolver el problema, que está dificultando la solución del problema, y que ha estado con el señor Macías.
Sería penoso que alguien, incluso alguien que tal vez tenga mezclados los intereses políticos con los económicos, esté intentando dificultar la participación y la organización de los padres y las madres que quieren proteger a sus hijos.
En el AMPTA del instituto hay padres o madres de alumnos o de alumnas, que tienen sus profesiones y sus trabajos, que están intentando parar este atropello que el señor Macías quiere hacer con alguna ayuda en Villanueva, que están informando a los padres y las madres lo mejor que saben porque creen que los padres y las madres tienen derecho a tener esa información que les afecta y a tener la oportunidad de defender a sus hijos e hijas. Si los padres y las madres quieren o no defender a sus hijos, una vez informados, es ya asunto de ellos.
Nadie del AMPTA dice sus pensamientos políticos ni se le preguntan. Si tienen preferencias, conocidas o no, es asunto interesante pero asunto de cada uno de ellos.
El AMPTA no se va a callar, va a seguir dedicando su tiempo a defender a sus propios hijos y a los hijos de los demás, incluidos los de aquellos padres o madres que tengan dudas sobre lo que hace el AMPTA. Lo va a hacer como se hace en toda institución participativa y representativa: reuniéndose, debatiendo, comunicándose con los padres y madres, dialogando con otras instituciones, etc. A sus reuniones, que son abiertas siempre, pueden acudir los padres o madres que lo deseen y puedan, claro está que sólo aquéllos que tengan a sus hijos en el instituto (condición única).
Nadie en el AMPTA vive de la política sino de su trabajo. Por eso pensamos que quienes tienen que resolver este problema son los políticos que sí viven de la política. Y éste es un problema político (no es un fenómeno de la Naturaleza): urbanístico, normativo, presupuestario y administrativo. Varias instituciones políticas han creado el problema, no el AMPTA. Y es lo bueno que ellos lo resuelvan. Porque nuestros hijos tienen que ir al instituto en transporte escolar, con la misma consideración que han tenido hasta ahora.
El Alcalde es la institución más representativa y es la que más fuerza institucional tiene en el municipio ante otras instituciones. Ha sido elegido por los ciudadanos, y por cuatro años, al término de los cuales sólo puede ser removido por quienes le han elegido y por el mismo procedimiento. En cambio, por ejemplo un Director de Área lo es por libre designación de una autoridad superior, no tiene cimientos en nadie porque no representa directamente a nadie, su ejercicio no tiene plazo, está disponible y puede ser cesado en cualquier momento por quien le designó, por ejemplo si comete errores o si crea problemas.
Por eso el AMPTA considera al Alcalde como el mejor negociador, cuyos primeros pasos ya ha dado y que el AMPTA apoya. El AMPTA está a favor del Alcalde en sus negociaciones ante la DAT, o ante la Consejería de Educación, a donde ya ha dirigido un primer contacto.
El AMPTA confía en que el Alcalde, que ya ha mostrado y manifestado su preocupación por el problema, sabrá resolverlo. Ya lo hizo, cumpliendo su promesa, desde el principio del instituto, pues durante dos años hizo que el ayuntamiento pagara el transporte y luego logró que lo pagara la DAT.
Estamos convencidos de que el transporte era necesario, el Alcalde lo dijo y prometió, ordenó su pagó y luego lo negoció en la DAT. Nada ha cambiado y por tanto sigue siendo necesario hoy y en el futuro. Confiamos por segunda vez en que, como la primera, sabrá encontrar la solución.
Esperamos que la corporación municipal, toda, estará detrás de él y a lo que diga él, que no es otra cosa que lo que decimos las APAs y los Consejos escolares y los Equipos directivos y los Claustros y los alumnos del instituto: que necesitamos las seis rutas de siempre con los seis autobuses de siempre y que los alumnos de bachillerato vayan dignamente a estudiar al instituto.
Después de todo, la situación sigue siendo la misma: han decidido que nuestros hijos vayan andando y nosotros vamos a defender a nuestros hijos para que vayan dignamente, como merecen, en autobús, como siempre.
AMPTA Ies Sapere Aude
No hay comentarios:
Publicar un comentario